Oriol Mitjà, otro juguete roto del Procés
Oriol Mitjà. Fuente: CCMA
Tras casi 8 años del camino que han ido marcando los diferentes 'fulls de ruta' que los líderes nacionalistas catalanes iban confeccionando sobre la marcha la vorágine propagandística que es el llamado Procés se iba tragando en sus entrañas a toda clase de personajes.
Jordi Pujol, Artur Mas, Oriol Junqueras, Bea Talegón, Albano Dante-Fachín... y un largo etc que podría dar para varios folios. La propaganda en política, como la canción del verano, es lo que tiene; si suena mucho lo mismo acaba cansando y se aborrece.
Con ocasión de la irrupción del COVID-19 en nuestras vidas el motor propagandístico procesista no tardó en ponerse en marcha a toda máquina allí por el mes de marzo. Y se buscó un personaje de corte 'científico' que diera robustez al mensaje.
Y la historia, lógicamente, ha acabado mal. Oriol Mitjà ha acabado llamando tontos a los que lo auparon y con un ensayo que prometía mucho pero que, siguiendo la propia vara de medir del propio Mitjà con sus colegas de Madrid a los que pedía la dimisión, ha sido un rotundo fracaso.
Desde el 'confinament total' a realizar pronósticos en plan vidente como que no habría público en el Camp Nou hasta octubre como si tuviera una bola de cristal... por no contar la canción que le dedicaron en el programa FAQS de TV3 hace pocas semanas...
Oriol Mitjà es otro juguete roto del Procés al que intentarán acallar desde los mismos altavoces que antes lo vanagloriaban. Ha hecho de actor durante estos meses como tantos otros. Y en la era post-COVID de la nueva normalidad ya no les sirve.
