Quim Torra se niega a entregar su acta de diputado y ataca a la Junta Electoral Central (JEC), a la que acusa de presionar al líder del Parlament, Roger Torrent, para que le retire la credencial.
En un comunicado de la Oficina del Presidente, el independentista amenaza a este organismo con “acciones legales, también de carácter penal” si le obliga a dejar de ser parlamentario. El dirigente de JxCat mantiene que la JEC no es competente para tomar esta decisión y que podría estar incurriendo en un delito de coacciones.
Torra advierte que pensar que él estaría incurriendo en un delito de usurpación de funciones públicas si participa en un pleno se esgrime “para coaccionar a aquellos que defienden la soberanía del Parlament”. En esta línea denuncia que “las presiones a las que se pretende someter” a Torrent y otros miembros de la Cámara “están llegando a límites insostenibles e incompatibles con el ordenamiento jurídico”.