Rusia y Cuba están del lado de Nicolás Maduro. Y así lo han vuelto a hacer público este fin de semana. Ambos han mostrado su apoyo al líder chavista frente a la crisis interna y al conflicto diplomático que sufre Venezuela tras la autoproclamación de Juan Guaidó como presidente interino el pasado 23 de enero. Tanto Rusia como Cuba apuntan con dedo acusador a EEUU.
La presidenta del Senado ruso, Valentina Matvienko, ha asegurado tras su encuentro con la vicepresidenta del Gobierno venezolano, Delcy Rodríguez, en Moscú que Rusia hará todo lo que está en su mano para evitar la intervención estadounidense en el país.
La política ha expresado su preocupación y sospecha ante los medios: “Nos preocupa que los Estados Unidos esté listo para todo tipo de provocaciones para que se derrame sangre, para encontrar motivos que justifiquen la intervención militar. Haremos lo posible para impedirlo”.
“Rusia rechaza la injerencia externa en los asuntos de Estados soberanos”, ha sentenciado la senadora, declaración que ha sido defendida por el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel en redes sociales.
“Manos fuera de Venezuela”, ha espetado el mandatario cubano, que también ha denunciado los intentos “perversos” de la administración Trump: “EEUU continúa con su perverso afán de fabricar falsos pretextos para justificar la intervención y la agresión a Venezuela”.