El segundo encuentro entre Donald Trump y Kim Jong Un ha finalizado antes de lo previsto. Ni declaración conjunta, ni acuerdo. Los máximos dirigentes de EEUU y Corea del Norte han dado por concluida de forma abrupta la cumbre al segundo día. Lo han hecho por diferencias sobre la desnuclearización de la Península de Corea y el levantamiento de sanciones al Estado norcoreano.
En rueda de prensa, el líder estadounidense ha aclarado en el motivo de las desavenencias han sido las exigencias de Pyongyang: “Querían que levantásemos las sanciones completamente, y no podíamos hacerlo”. El magnate neoyorkino, que se enfrenta en su país a la polémica declaración en su contra de su exabogado Michael Cohen, ha añadido que a veces “hace falta abandonar” las negociaciones para avanzar.