Irene Montero y Pablo Iglesias se quedan
Irene Montero y Pablo Iglesias. Fuente: Europa Press
Se quedan. Pablo Iglesias e Irene Montero han superado la consulta interna relacionada con su continuidad tras la polémica surgida por la compra del chalet. La portavoz parlamentaria y el secretario general de Podemos han contado con el apoyo del 68’72% de los inscritos que han participado en la votación, mientras que el 31’58% ha apostado por la dimisión.
A través de su perfil de Facebook, el secretario de Organización de la formación morada, Pablo Echenique, ha hecho públicos los resultados de esta consulta que ha tenido una participación alta, ya que han votado 188.176 personas, superando así en 33.000 los que lo hicieron en Vistalegre II, cuando Pablo Iglesias renovó su liderazgo.
La votación (se abrió el martes y se cerró el domingo) buscaba resolver la polémica que afecta al partido y a dos de sus dirigentes tras la decisión de la pareja de comprarse una vivienda en la sierra madrileña por más de 600.000 euros, compra que ha desatado críticas en el mismo seno de Podemos, sobre todo por parte del sector anticapitalista.
Cabe destacar la participación, factor que el secretario general calificó de importante de cara a la decisión de las bases, ya que manifestó que de ser “baja” tendría que considerarse un “fracaso” y les obligaría también a dimitir aunque ganara el ‘sí’. Finalmente la consulta ha sido la más participativa hasta el momento, superando a la de Vistalegre II.
En aquella ocasión la participación fue del 33% de los 455.000 simpatizantes llamados a votar, mientras que en esta ocasión han votado el 38’47% de los 487.772 militantes. En concreto han participado 188.176 personas en esta última consulta, frente a las 150.000 que lo hicieron para renovar los estatutos y la dirección del partido.
La pregunta que los inscritos debían responder era la siguiente: “¿Consideras que Pablo Iglesias e Irene Montero deben seguir al frente de la secretaría general de Podemos y de la portavocía parlamentaria?”. Las respuestas eran: “Sí, deben seguir” o “No, deben dimitir de la secretaría general y de la portavocía parlamentaria y dejar el acta de diputados”.
Del total de votantes (188.176), 128.300 (68’42%) han defendido la continuidad, mientras que 59.224 (31’58%) han apoyado la dimisión y 652 (0’35%) han votado en blanco. No ha habido sorpresas, si bien llama la atención el porcentaje de militantes que ha apostado por la dimisión.
