Corea del Norte responde a Trump en tono conciliador: “Nuestro mayor esfuerzo por el bien de la paz”
Kim Jong Un, líder de Corea del Norte. Fuente: Europa Press
Corea del Norte está dispuesta a enterrar el hacha de guerra y a hablar con EEUU, después de que el país norteamericano haya cancelado la cumbre. El Gobierno norcoreano responde a la beligerante carta enviada por Donald Trump a Kim Jong Un con un tono conciliador: “Expresamos nuestra voluntad de sentarnos cara a cara con Estados Unidos y resolver los problemas en cualquier momento y de cualquier manera”.
El viceministro de Asuntos Exteriores norcoreano, Kim Kye Gwan, ha afirmado este viernes que su país está por la labor de mantener las conversaciones con EEUU y resolver las diferencias entre ambas naciones, según ha apuntado en un comunicado difundido por la agencia oficial norcoreana, KCNA.
“Nuestro compromiso por hacer nuestro mayor esfuerzo por el bien de la paz y la estabilidad para el mundo y la península de Corea no ha cambiado y mantenemos nuestra mente para dar tiempo y una oportunidad a Estados Unidos”, ha aseverado el viceministro, que ha asegurado que la decisión del país norteamericano de cancelar la cumbre de forma unilateral demuestra lo grave que es la hostilidad entre Pyongyang y Washington, lo que, según ha dicho, revela la necesidad urgente de celebrar una reunión entre los líderes de ambas naciones.
“A pesar de todo esto, la decisión unilateral de Estados Unidos de cancelar las conversaciones hace que reconsideremos si todos los esfuerzos y el camino que hemos tomado es realmente el correcto o no”, ha afirmado Kim Key Gwan.
Estas declaraciones se producen horas después de la Casa Blanca haya publicado la carta enviada por Trump a Kim, en la que le informaba de que cancelaba la cumbre prevista para el 12 de junio en Singapur al considerar "inapropiado" seguir adelante con la reunión, teniendo en cuenta la "hostilidad" con la que cree que ha actuado el Gobierno norcoreano en los últimos días. El magnate neoyorkino, que volvía a apelar al “diálogo” como elemento clave para resolver las disputas abiertas, añadía: “Hablas de vuestra capacidad nuclear, pero a nuestra es tan masiva y potente que rezo a Dios para no tener que usarla nunca”.
